Sicarios acribillaron a un hombre ante una familia

BABAHOYO. Miembros de la Policía Judicial recogieron evidencias en la vivienda en donde se cometió el crimen.

El nerviosismo era evidente la mañana de ayer en Mireya Burgos al recordar el violento episodio que vivió la noche del miércoles junto con sus dos hijos en el interior de su vivienda, en el sector conocido como El Monumento.

La mujer rememora que a las 23:00 estaba con sus hijos, menores de edad, observando la televisión, cuando en forma imprevista uno de sus vecinos, Junior Isidro Jiménez Ruiz, de 40 años, tumbó la puerta e ingresó apresurado; atrás lo seguían unos desconocidos armados que le dispararon.

Jiménez cayó herido en la sala de la vivienda, frente a Burgos y sus hijos, mientras sus atacantes se acercaron y le volvieron a disparar a la víctima, en medio de los gritos de la mujer que abrazó a los menores y se arrojaron al piso.

De inmediato, los sicarios se alejaron del lugar y abordaron una motocicleta.

A los pocos minutos, familiares y amigos de Jiménez llegaron al sitio y lo trasladaron hasta un hospital, donde los médicos comprobaron que había fallecido a causa de seis disparos: dos en el tórax, dos en la espalda y dos en la pierna derecha.

María Espinoza, esposa del occiso, dijo que minutos antes del atentado habían tenido cerca de 20 minutos conversando en la vereda cuando llegaron dos desconocidos en una moto roja y comenzaron a insultarlo. De repente, uno de ellos sacó un arma, por lo que Jiménez salió en precipitada carrera para buscar un lugar donde esconderse, por eso ingresó a la casa de la vecina.

Según Patricia Jiménez, hermana de la víctima, su familiar era una persona tranquila que se dedicaba al comercio, por lo que dijo no entender por qué lo asesinaron.

Se conoció que el occiso deja a dos hijos en la orfandad. Allegados pidieron que las autoridades investiguen el crimen y capturen a los asesinos.

Agentes de la Policía indicaron que el sector El Monumento está considerado como zona roja en el cantón Babahoyo. Moradores que no se identificaron por temor señalaron que en el lugar se expende droga, por lo que pidieron patrullajes.

Federico Estrella, fiscal de turno, realizó el levantamiento del cadáver y confirmó que la víctima recibió seis disparos.

Se informó que al momento se descarta el robo como móvil del crimen, porque el occiso tenía sus documentos y dinero.

La Policía no informó si Junior Jiménez tenía antecedentes delictivos.

Ayer se realizó el velatorio de la víctima en medio del pesar de familiares y amigos. En tanto que en la mañana de ayer, los hijos de Mireya Burgos recibieron asistencia médica y psicológica, pues fueron testigos de una muerte violenta en su vivienda.
Tomado de: El Universo.com.ec